A estos límites se les conoce como umbral de daño económico, el cual constituye una amenaza para las cosechas y un riesgo para la inversión del agricultor.Las plagas son capaces de infestar el maíz en cualquiera de las etapas de desarrollo y durante el almacenamiento; atacan cualquier parte de la planta, incluso el grano, y se les asocia a enfermedades y otros riesgos sanitarios, como la presencia de hongos y toxinas.
El gorgojo de arroz o gorgojo negro es la plaga más destructiva del grano almacenado. Puede volar y algunas veces infecta los granos tanto en el campo como cuando están almacenados.
Los adultos son de color café rojizo y de 3 mm de largo. Tiene cuatro manchas amarillas o rojo claro en las cubiertas de las alas y las orillas del pronoto son redondeadas.Las larvas, sin patas, tienen cuerpo pequeño, gordo y blanquecino y la cabeza bronceada. Tanto los adultos como las larvas se alimentan de una gran variedad de granos. Las hembras cavan un agujero en su depresión, sellando el agujero con un fluido gelatinoso. Pueden poner de 300 a 400 huevos a lo largo de su vida (4 a 5 meses). El adulto emerge del grano a través de un agujero irregular por encima de la piel de la pulpa. Este agujero de salida es la primera señal del grano dañado. Estos estados de huevo, larva y pupa se completan en 26 días.En los granos infectados que no tienen un daño a simple vista, se detecta la presencia de este gorgojo con técnicas de coloración. Se sumerge el grano en una solución de fucsina ácida de 2 a 5 minutos. Los sellos gelatinosos (realizado en el grano por el gorgojo) son del tamaño de la punta de un alfiler, y presenta un color rojo cereza brillante. Con la violeta de genciana los huevos se tornan morados.